A mí a veces me pasan cosas muy locas. Cosas que, si creyese en el destino, me darían incluso miedito, pero como no, me parecen casualidades alucinantes. Este verano quise hacer pastas de mermelada sin gluten. De esas bonitas que tienen un agujerito por el que se ve la mermelada de dentro. Gluten free linzen cookies si las queréis buscar in English. Durante los días libres que me cogí sin bodas en agosto probamos Iván y yo con un par de recetas. De sabor quedaron guachi pero el tema mermelada fue caos porque con los trozos es imposible que quede ni un poco niveladas.
Luego volví a empezar con las bodas y no pensé más en las pastas de té hasta el otro día, en el que, después de verlas en el escaparate de una confiterita y lloriquear un poco, me encontré dándole vueltas al tema mermelada y valorando si sería muy loco meterla en la Thermomix para triturarla bien y que no quedasen trozos. Y en esas estaba cuando me llegó un email. ¡Ding dong! (¿no sería una maravilla que los emails bonitos llegasen con el sonido de un timbre, como una visita esperada?). Me preguntaban si me apetecía hacer una colaboraciön con La Vieja Fábrica cremosa, la nueva crema de mermelada. Mis cara era como la carita amarilla del whatsapp, la de los ojos muy abiertos. ¡Si era eso lo que andaba buscando!
Estrictamente solo acepto colaboraciones que os puedan aportar algo, así que me puse a buscar en internet, y no encontré apenas recetas como la que yo tenía en mente, creo que tres. Y os lo prometo, celiaquitos míos, tenéis que probarla porque está increíble. Así que dale, mermeladas para casa y yo manos a la obra.
La mermelada de La Vieja Fábrica cremosa, deliciosa y ligera. Me preocupaba que con eso de «en crema» fuera tipo potito, pero no. No es muy suelta y conserva totalmente el aspecto de fruta a pesar de ser una crema. Daba saltos ya pensando en mis galletas, jajaja, por favor tengo que dejar de comer.
Por supuesto, los no celíacos, vosotros no me preocupáis, tenéis miles de recetas al alcance de un clic. Solo tened en cuenta el tema mermelada porque si es con trozos, ñeeec, error.
Pues va la receta:
250 g de harina Mix C de Schär
85 g de almendra molida
150 g de azúcar glas
2 yemas de huevo
230 g de mantequilla a temperatura ambiente
una cucharadita de ralladura de limón
unas gotitas de esencia de vainilla
una pizca de sal
mermelada de La Vieja Fábrica cremosa
más azúcar glas para cubrir las galletas
Lo primero que hice fue dorar la almendra molida en el horno, herencias maniáticas de mi madre. Ella siempre dice que la almendra sin tostar no sabe a nada. Pero no quemada, que amarga. Es un poco estresante este momento, podéis pasar. Si lo queréis hacer, a 80-100º y dándole vueltas cada dos o tres minutos hasta que esté doradita.
Mezclamos la mantequilla con el azúcar glas. Cuando esté muy cremosito añadimos las dos yemas de huevo, las gotitas de vainilla y la ralladura de limón y batimos, batimos hasta que esté esponjoso. Luego, la almendra molida. Y por último la harina, ya mezclada con la sal. Vais a ver que queda muy durita y que cuesta un poco remover bien.
Como las harinas sin gluten van por caminos inescrutables, tenéis dos opciones. Si la masa final os ha quedado blandita, extendedla en dos hojas de papel de horno, una para las bases y otra para las tapas, y metedla en el frigo una hora. Después con el cortapastas ya es coser y cantar. Si os ha quedado durita la podéis extender con el rodillo y cortarla en el momento. Yo usé un cortapastas especial para galletas linzen que ya traía el dibujito de dentro, pero con cualquiera que tengáis más pequeñito vale.
Importante, yo no las movería. Como tienen que ir una sobre otra es importe que no se deformen para que luego encajen bien.
Truqui 1: quitar la masa que queda alrededor en lugar de mover la galleta.
Truqui 2: si tenéis que quitar la galleta, recortad el papel de horno y movedlo con él. Yo incluso las horneo con él y solo se lo quito cuando están frías. Las masas sin gluten son complicadas de trabajar y, a lo mejor es que soy una cobarde, pero cuanto menos las toque mucho mejor.
Vale, seguimos. Galletas al horno, 180º, unos 15 minutos. Las váis mirando y cuando los bordes se empiecen a poner tostaditos, fuera. Estas galletas molan blanquitas, así que nada de retostartas ni de pintarlas con huevo ni esas cosas. Cuando estén frías, las despegamos del papel de horno y listo. Mola mucho guardar y hornear también las minigalletas que sacamos del centro de las tapas, en mi caso eran corazoncitos.
Ahora viene lo más divertido, la parte de montar y decorar. Primero cubrimos las tapas con bien de azúcar glas, a mí me encanta ponerle un montón pero eso es para gustos. Le vas dando toquecitos con un colador y maravilla, ¡empieza a nevar!
Después solo tenemos que untar con una capita generosa de mermelada La Vieja Fábrica cremosa la galleta de abajo, poner la tapa y presionar un poco. ¡Y listo! Yo estuve tentada a ponerle más mermelada por el agujerito pero luego me pareció suficiente. Y eyyy, ¿qué os parece?, planazo de merienda, antojo satisfecho, receta vuelta a probar y producto nuevo probado también que me llegó como caído del cielo.
Por cierto, además de los mil usos normales de la mermelada, la he metido en el decopen de Lekué y cabe genial, así que también es perfecta para decorar, si los siropes os dan medio asquillo como a mí, ¡qué mejor que con mermelada de la buena!
Mis celiaquitos, si probáis estas pastas contadme. Y si no lo sois pero tenéis algún amigo o familiar, es una sorpresa increíble para hacerles cualquier día. De llorar. Mil gracias chicos por enviarme La Vieja Fábrica cremosa, la nueva crema de mermelada. Ahora tengo empacho por vuestra culpa.
¡Un besito gigante y feliz lunes, pequeños!
Indara
chus says
Te han quedado preciosas y seguro que también están buenísimas. Una vez vi una recetas que se hacían poniendo un caramelo en el agujero de la pasta y se derretía en el horno. Esta crema la tengo que probar. Un besito.
Clau says
Graciaaaaaaas!!!!!!!!!!!! Como celiaca y madre de celiaca, mañana las hacemos!! Y la mermelada mi hijaodia los trozos, tu también has llegado como dices, caida del cielo. Gracias Indara
maria says
Que te lo he dicho en IG pero en el blog están aún más espectaculares!!!!
voy a tener que lanzarme un día a por ellas, hacerlas y comerlas
¿las has hecho con harina normal?
un abrazo
Elisabet says
Hola Indara,
Acabo de "aterrizar" aquí viniendo del curso HelloBloggingPRO.
Me ha encantado dar contigo y con tu blog! Confieso que lo que me ha cautivado es parte de tu descripción del blog con eso de "aunque a veces creo que es de todo menos bodas" 😀
Y me ha enganchado total tu forma de hablar, con esas cosillas como lo del timbre bonito para los emails" y tus fantásticas fotos!
Un besote desde Deutschland*
Elisabet*
Mª ELENA BARRERA says
Me encantan tus cosas, pero con las mermeladas de mi pueblo aún más porque son deliciosas...